Find food that fits your pet's needs
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Los grandes y húmedos besos son una de las mejores cosas de tener un perro, al menos de acuerdo con algunas personas. Para otras, su reacción cuando un perro las lame es más bien un gemido de asco. Ya sea que te guste darle besitos a tu perro o no, es mejor entender si deberías permitirlo.
¿Por qué los perros lamen?
Lamer es un comportamiento que los perros aprenden desde el nacimiento, dice Animal Planet. En cuanto los perros nacen su madre los lame para limpiarlos y estimular la respiración y los cachorros aprenden a lamer a su madre en respuesta. Este instinto de lamer nunca desaparece. El proceso de lamer libera endorfinas que causan una sensación de placer y ayudan a aliviar el estrés, es por eso que algunos perros tienden a lamer obsesivamente cuando se sienten ansiosos. En las manadas de perros, lamer también es una señal de sumisión a miembros más dominantes de la manada. Sin embargo, cuando los perros lamen a seres humanos generalmente es una señal de afecto, aunque a veces tu perro podría lamerte simplemente porque tienes un buen sabor.
¿Es seguro que un perro te lama?
Aunque antes se creía que las bocas de los perros eran más limpias que las de los seres humanos y que la saliva de los perros tenía propiedades curativas, este mito ha sido desmentido por completo. Al considerar que los perros tienden a comer sus heces y a lamerse sus partes privadas, probablemente no es una sorpresa enterarte de que en realidad la boca del perro es un nido de gérmenes. Sin embargo, aunque la saliva del perro puede portar bacterias tan peligrosas como Salmonella y E. coli, así como parásitos tales como Giardia y Cryptosporidium, estas enfermedades generalmente no se encuentran en cantidades lo bastante elevadas como para representar un peligro para la mayoría de los humanos, existen muy pocas evidencias de que los besos de los perros sean un medio de transmisión.
¿Cuándo besar a un perro no es seguro?
Pese a que el riesgo de que la persona promedio contraiga una enfermedad por la saliva de un perro es muy bajo, existen algunas personas para las que el riesgo es demasiado elevado como para correrlo. Bajo ninguna circunstancia debes dejar que tu perro lama a una persona que esté en las siguientes categorías, de acuerdo con Vetstreet:
- Bebés
- Mujeres embarazadas
- Ancianos
- Personas con espinillas o llagas abiertas o con arañazos en el rostro
- Personas con sistemas inmunitarios reducidos, como personas que están recibiendo quimioterapia, pacientes de SIDA, diabéticos y cualquier persona que se esté recuperando de una enfermedad
¿Cómo reducir el riesgo?
Puedes reducir el riesgo de contraer enfermedades por los besos de un perro con sólo ser un padre de mascotas responsable. Los exámenes de salud regulares que incluyan análisis fecales y los tratamientos para eliminar lombrices y controlar las pulgas, garrapatas y otros parásitos pueden ayudar mucho a reducir las probabilidades de que tu perro te transmita una infección. Eliminar correctamente las heces de tu perro y lavarte bien las manos después de hacerlo también puede reducir el riesgo de propagar enfermedades. Además, es importante cocinar bien el alimento de tu cachorro: nunca le des algo crudo que pueda ser una fuente de infecciones bacterianas, como carne cruda. Elige un alimento para perros que esté balanceado y formulado especialmente para la salud de tu mascota. También debes cepillarle los dientes con regularidad para mantener su salud bucal y matar las bacterias que pueden estar en su boca.
¿Cómo evitar que un perro lama?
Aunque puede ser seguro permitir que tu perro te lama el rostro y la boca, si prefieres no arriesgarte, lo mejor que puedes hacer es cortar la conducta de raíz, enseñándole a tu perro a no lamerte el rostro. La entrenadora de mascotas Victoria Stillwell, en una charla con Animal Planet, sugiere que la mejor manera de hacerlo es levantarte y alejarte de tu perro cuando empiece a lamerte, ignorando por completo el comportamiento. Al hacerlo le quitarás a tu perro cualquier gratificación que sienta al lamerte y eventualmente dejará de intentarlo.
Si te encanta intercambiar besos con tu perro, probablemente es seguro seguir haciéndolo, siempre y cuando tu sistema inmunológico esté bien. Pero si el solo pensar en tu perro lamiendo tu boca te hace salir corriendo por el jabón antibacterial existe suficiente riesgo para justificar tu aversión. En última instancia, permitir que tu perro te lama el rostro depende de tu estado de salud y tu nivel de tolerancia al riesgo. De cualquier manera, tienes muchas otras maneras de compartir afecto con tu perro, así que no te sientas mal si prefieres que no te lama.